Las relaciones de poder se establecen en muchas relaciones de pareja, más de las que pensamos. Es algo que sucede de forma sutil y que sin darnos cuenta nos sentimos atrapados en la tela de araña.

Pero…¿cómo se construye la figura del dominante? ¿y la del sumiso?

Esto no solo está en nuestra naturaleza, también hay un caldo de cultivo que ha influenciado a todo ello. Depende de lo que hemos visto en nuestra infancia, si presenciamos ese tipo de dinámicas. Y sobre todo, ¿con qué rol nos sentimos más comprensivos o empáticos? Ese será el que al final adquiriremos de forma inconsciente, o bien el contrario por rechazo a este.

Sin darnos cuenta, como adultos nos vemos repitiendo pautas y conductas.

Pautas que sin ser conscientes acaban sometiendo a otro en una cárcel y a nosotros mismos.

*Consulta terapéutica (más información)

*Solicita consulta online (clica aquí)